<"DOCTYPE html PUBLIC "-//W3C//DTD XHTML 1.0 Strict//EN" "http://www.w3.org/TR/xhtml1/DTD/xhtml1-strict.dtd"> Sin Imprenta: Rutinas que matan. Escrito por Dark Angel

9/15/2004

Rutinas que matan. Escrito por Dark Angel

Casa, bus, oficina, bus, casa, lunes, martes, miércoles...más de 12 horas entre cuatro paredes. Me distraigo vagamente en mi pequeño escape a la vida real, y me pierdo viendo a la gente ir y venir, levanto mi mirada al cielo; veo un cielo azul despejado, día soleado, vivo... rectángulo que contrasta con las grises y sombrías paredes de mi oficina. Respiro hondo y renovo mi energía, me conecto entre la vida que hay más allá de la ventana y empiezo a divagar, a soñar, a pensar en tí. Del trance sólo pudo sacarme el Prr Prr Prr Prr insoportable, estresante, esquizofrénico del maldito multilíneas...En mi corazón despierta la emoción de pensar que puedes ser tú quien con tu voz me transportes a ese lugar donde sí podemos estar juntos; donde no hay distancias, ni problemas, ni personas.... Y en ese preciso momento contesto... es un cliente bla bla bla bla bla, bla bla (recordé a Sabina con Fito), y despierto a la realidad. Sigo trabajando como hormiga, tratando de que cada minuto que transcurre, no se robe mis ganas ni mi ímpetu de verte, de oírte, de sentirte. Hora de salida. El teléfono está mudo hace cinco minutos...¿será que nos cortaron el teléfono? Hago la prueba cada 30 segundos... sí,si hay tono de marcado. Caigo en paranoia por verte, tener noticias tuyas, ¡saber de tí! Debes estar ocupado en alguna reunión o resolviendo algún problema. Mi corazón se acelera al bajar las escaleras, alucino con verte allí, afuera, esperándome... pero no. No sé nada de tí y camino entre el barullo de gente que se apura para llegar a su objetivo, mientras yo camino errante sin sentido hacia cualquier lugar donde sé que no estarás. Poco a poco, a medida que llego a casa, voy reaccionando que no somos nada, que todo quedó allí en un encuentro casual lleno de culpas y arrepentimientos y que ya no volverás a llamar, y cierro mis ojos junto a mi cama vacía, tan sólo me acompaña tu ausencia, los escasos recuerdos que quedan en mi mente, pequeños flashes iluminan mis lagunas y apareces tú, sonriendo a mi lado mandando a la mierda a todos y a todo...y escucho nuevamente el Prrr Prrr del despertador; comienza nuevamente la maldita rutina que al menos contigo, tenía un matiz diferente, más vivible, especial... Pero el show debe continuar, y la vida debe de seguir, aunque ya no estés junto a mí, y yo siga pensando en tí, debo buscar otra motivación para vivir...
me voy al gabinete

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